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Capitulo 762

“¿Quién es mi to?”

Lea preguntó, un tanto confundida.

Siendo tan joven, aún no se acordaba bien a las personas.

Cuando Amelia estaba presente, considerando los hábitos parasitarios de Fabio y Blanca, casi nunca llevaba a Dorian a la mansión, ni lo integraba en las comidas familiares, incluso si Blanca pedía que lo trajera para compartir una comida, siempre encontraba la excusa de que Dorian estaba demasiado ocupado para poder evitarlo.

Pero é realmente estaba ocupado en ese tiempo.”

Por lo tanto, Lea no reconocía a este tio en términos formales.

“Justo el…”

Fabio estaba a punto de explicarle que era Dorian, cuando Beatriz se adelantó: “Es el atractivo señor que acaba de salvar a Lea”

Ella miró a Fabio mientras hablaba, explicándole con calma: “Vino a ver cómo estaba Lea”

No estaba segura de si Lea habia visto a Amelia o si habia reconocido a Amelia antes, aunque la niña había estado llorando todo el tiempo, ella habla acercado bastante. Preocupada por si Lea, siendo tan inocente y joven, podria decir algo más, continuó explicando:

“El fue quien salvó a Lea, y también quien me pidió que la trajera aqui para cambiarle la ropa mojada. Estaba preocupado por la niña, solo queria asegurarse de que estaba bien,”

Lea se distrajo con las palabras de Beatriz yasintió con la cabeza, diciendo: “Sí, ese señor me salvó hace un rato, cal al agua.”

La atención de Fabio, sin embargo, se contró en el término usado. Text © 2024 NôvelDrama.Org.

“¿De qué señor estás hablando? Dile tio.” Pronto le corrigió

Beatriz se irrité de inmediato, dándole un golpe: “Fabio, acaso estás loco? La niña te está diciendo que se cayó al agua y tú preocupandote por cómo debe llamar a la gente? ¿Acaso actúas como deberia hacerlo un padre? Dejaste a Lea sola al lado del estanque, su pulsera cayó al acuario, y al intentar recuperarla, termino cayendo dentro. Si no fuera porque el Sr. Ferrer pasaba por shi y la vio, levantandola del agua, quién sabe que hubiera pasado.” Beatriz, cada vez más enfadada, le lanzó a Fabio una bolsa con ropa mojada: “Nunca he visto a un padre tan irresponsable como tú. Si a Lea le hubiera pasado algo, ¡no te lo hubiera perdonado jamás!

Fabio apenas logró atrapar la bolsa, reflexionando mientras sacaba la ropa mojada: “El curado salvó a Lea, eso es una enorme deuda de gratitud Tendré que visitarlo personalmente para agradecerle como se debe.”

Beatriz se quedó sin palabras,

Cuando Dorian regresó al restaurante, Amelia ya habla ordenado la comida.

Ella le pasó el teléfono a Dorian: Pedi algunas cosas, pero no sé si inclui algo de tu gusto. Mira si quieres agregar algo más, tampoco recuerdo que fa gusta.”

“Nuestros gustos son iguales, dijo Dorian, devolviéndole el teléfono, situ ya ordeneste, está perfecto. No tienes que preocuparte por mi

“Yo sé lo que a papá le gusta comer.” Serena Intervino rápidamente, extendiendo su mano hacia Amelia, Mamá, deja que le eche un vistazo” Amelia se rio, pasándole el teléfono: “¿Ya sabes leer?”

Serena se quedó perpleja, echando un vistazo al teléfono de Amelia sin entender nada.

“Entonces… entonces… Tartamudeó por un momento antes de encontrar una solución, “Cuando el mesero traiga la comida, yo te dire si es algo que a papá le gusta.”

“¿Y si no lo es? Dorian la miro sonriendo, preguntando.

Sin pensar, Serena respondió: “Entonces yo ayudaré a papa a comerlo todo.”

Donan le lanzó una mirada llena de emoción: “Qué hija tan considereda.”

Luego se dirigió a Amelia, diciéndole: “Por cierto, lo que Yael to mencionó hoy, no tienes que preocuparte. Me encargaré yo, lo resolver”

“¿La cosa del muelle?”

Amelia pregunto, ni ella ni Dorian hablan sido claros en la oficina, pero dado que Dorian ya lo sospechaba, ella decidió no seguir ocultandoselo y preguntar directamente.

Dorian asintió “SI”

Por favor, no vendas el muelle.” Amelia le dijo suavemente, “Tengo mi propia capacidad de pensamiento y mi propio juicio, mi madrina no puede eifluenciarme en nada, no hayas algo que te haga perder más de lo que ganas.”

“Tranquila, nunca hago negocios que me hagan perder Dio Doman, Créme que tengo la capacidad de manejarlo adecuadamen

Tur

– Capítulo 762

Amelia no pudo evitar fruncir el ceño, queriendo seguir persuadiéndolo, pero Dorian ya habla tomado la palabra: “El Grupo Esencia no llegó a donde está solo con lo acumulado por mi abuelo, ¿no confias en mi capacidad, ni en tu propio criterio?”

Amelia lo mird dudosa, pero finalmente, bajo su mirada y asintió lentamente: “De acuerdo.”

Y preocupada por si esto causaba problemas a Yael, rápidamente trató de disculparlo: “El Sr. Yael no me lo dijo a propósito, solo que fui a la oficina a buscarte con Serena y no te encontramos, y él no pudo resistir mi insistencia, así que confesó, no le eches la culpa por esto.”

Dorian se detuvo en el momento en el que intentaba coger un taco, y giró su cabeza hacia ella: “Amelia, pedir clemencia de esta manera no lo está ayudando, lo está perjudicando.”

Amelia lo miró sin comprender lo que estaba sucediendo.

“¿Eres de las que presionan a alguien por mi paradero cuando no estoy? Dorian preguntó a cambio.

Amelia no dijo nada. Ella no lo era.

“Así que esta excusa tan torpe, Dorian se detuvo para mirarla, además de ser para proteger a un hombre, no es como enviarlo directamente al pelotón de fusilamiento?”

Dorian extendió la mano y le acarició la cabeza de manera consoladora, su voz se suavizo: “Deja de mentir a partir de este momento, no te queda

blen.”

Amelia lo miró de manera un poco desafiante: “Es que no me queda bien mentirte a ti.”

Ella pensó que su argumento era sólido, pero incluso asi él encontró una falla.

Dorian sonrid: “Entonces no me mientas a mi. Comparada conmigo, todavía te falta experiencia.”

Amelia no pudo evitar mirar a Serena: “Soy tan inexperta, pero aun así, te engañé a 1”

Dorian: “Por eso, aprendi la lección y ahora estoy completamente prevenido contigo.”

Amelia se quedó sin palabras.

Serena, que miraba de uno a otro con los ojos muy abiertos, solo captó la palabra “mentir“, algo que podia entender, por lo que muy seriamente le dijo a Amelia: “Mamá, mentir es algo malo, tú me lo dijiste.”

por recordarmelo.”

Amelia le acarició la cabeza diciendo: Tienes razón, me equivoqué. Serena, gracias p

La niña, al ser alabada, asintió con satisfacción: “De nada, mamá.”

Dorian la miró con una sonrisa antes de dirigirse a Amelia: “No te preocupes, tengo la capacidad de discernir lo correcto de lo incorrecto, no le hare nada a Yael al contrario, tengo que darle un bono.”

Amelia también le ofreció una sonrisa y dijo: “Se lo merece.”

Dorian asintió con una sonrisa.

Al día siguiente, una enorme bonificación de fin de año fue depositada en la cuenta de Yael.

Al recibir la notificación de pago, este se sorprendió y rápidamente amo al departamento de finanzas para preguntar si habían cometido un error

“No se ha cometido ningún error, el Sr. Ferrer lo ordenó personalmente.” Le respondieron desde el departamento de finanzas.